Volvemos a las andadas. Como que los de la Asamblea Nacional Catalana, han llegado a la conclusión de que tienen que seguir haciendo cosas para mantenerse vivos, han convencido a Mas y a Junqueras para que elaboren una especie de «hoja de ruta»,-que es lo que se lleva ahora-, a fin de consensuar los temas que suponen más importantes, cara a la independencia. Así ya han proclamado que las elecciones van a ser «plebiscitarias». No se van a fusionar, ni van a elaborar una lista única. Esto, no. Cada uno se queda en casa. Pero por lo menos han manifestado que siguen teniendo fé en la independencia y que si ganan los partidos que optan por este objetivo, se va a redactar,- ya en serio- un borrador de Constitución y que en un par de años, se convocaría un referendum definitivo.
De este acuerdo se ha descolgado Unió Democràtica, los de Iniciativa y los de la CUP, aunque estos últimos han dicho que se lo pensarán, porque ellos son mucho más radicales en lo que afecta a la cuestión del soberanismo. En cuanto a los demócrata cristianos de Durán, todavía queda en el aire qué es lo que van a hacer. Han montado un partido, «Construim» que me imagino es la carta que se tienen guardada por si las relaciones con Convergencia empeoran. De todos modos, como que la política aquí en Catalunya tiene una fluidez tan grande, dentro de un par de semanas puede pasar cualquier otra cosa. No hace tanto tiempo que la misma Convergencia se proclamó «nacionalista» y no «independentista» y en cambio ahora vuelven a cambiar el discurso.
¿Hay que tomar a todos estos personajes en serio?.Pues, no sé. Diría que más bien no. Lo que sucede es que de un modo u otro están jugando con nuestro sistema de convivencia y con nuestro futuro.
Y esto no me gusta nada.