Los de la Cup, los llamados «cupaires» en una reunión científicamente asamblearia, han acordado por amplia mayoría, no investir a Mas. Esto es, se ha impuesto la tendencia contestataria, ortodoxa o también más congruente y seria, de acuerdo con los principios inspiradores del movimiento.
Han dicho que no a Mas, porque ya es viejo. Han dicho que no a Mas, porque forma parte de una secta corrupta, que aborrecen y desprecian. Han dicho que no a Mas, porque su objetivo no es gobernar, ni contribuir a una estabilidad. Su objetivo es la protesta, el «no». Para empezar, dar el primer paso para un «proceso constituyente». ¿Que significa el término?. ¿O que hay detrás?. Pues no se sabe. Porque el proceso constituyente puede ser una aspiración, sin calendarios, sin fechas, sin hoja de ruta.
Los del otro lado, los de Convergencia,- ahora democracia y libertad- con los aliados de Junqueras, ya han dicho también que ellos no se mueven. Que el president en funciones sigue en el pedestal, – es el único candidato- y que no hay alternativa. O Mas o elecciones en marzo.
Así las cosas, una televisión ya ha pedido a sus fieles que se pronuncien si el «proceso» está muerto. Parece que una mayoría asienten. Llegan a la conclusión de que estamos al final del camino. Bueno, por lo menos hasta 31 de dieiembre.
Termino diciendo que el suspiro de alivio para muchos, ha sido grande. Mejor elecciones han pensado, que un gobierno dependiendo de unos que se han confesado abiertamente contrarios al sistema.
Hay que ver las vueltas que da la política. Pura irracionalidad.
Y lo tenemos que aguantar.